Compras en línea es ese glorioso invento que permite a la gente comprar cosas desde la comodidad de sus hogares. No más viajes a múltiples tiendas para encontrar el producto adecuado; no más tener que tratar con vendedores demasiado entusiastas; no más colas largas en la caja.
El auge del comercio electrónico ha cambiado sin duda la forma en que compramos para mejor. Pero, como todo lo demás, el mundo de las compras en línea no es todo rosas. A pesar de todos los esfuerzos de las empresas de comercio electrónico para aliviarlos, hay algunos problemas que los clientes todavía tienen que enfrentar cuando compran en línea. A continuación se enumeran seis de estos problemas.
Cuestiones de calidad en la compra
El mayor problema al comprar cosas en línea es que usted no tiene ninguna garantía de la calidad de un producto. Las reseñas no siempre son confiables y toda la investigación no puede asegurar la calidad de un producto; los vendedores fraudulentos que intencionalmente engañan a los clientes para que aumenten las ventas son la razón principal de que los productos defectuosos se vendan en línea.
Con el volumen de productos que las empresas de comercio electrónico manejan hoy en día, puede ser bastante difícil para ellos realizar controles de calidad en todos y cada uno de los productos que están vendiendo.
Además, la cuestión de conseguir la talla correcta sigue siendo un grave inconveniente para la compra de ropa y calzado en línea. Los tamaños varían de una marca a otra, y como no se pueden probar los productos antes de comprarlos, seleccionar el tamaño es siempre una apuesta.
Entrega y logística del producto
Un problema que aparece constantemente cuando se hace una compra en línea es cuando se entrega el pedido. Aunque todos los sitios de comercio electrónico tienen sistemas de seguimiento de pedidos para sus clientes, no siempre son precisos.
El personal de reparto a menudo se presenta en nuestras casas cuando estamos en el trabajo o en algún lugar, ya que no hay manera de fijar una franja horaria en particular para que la entrega se lleve a cabo. Este mismo problema existe al devolver los productos.
Fallos de pago digital
Ya sea que un cliente esté pagando con tarjeta de crédito o débito, o una de las varias billeteras digitales que existen hoy en día, el fracaso de los pagos digitales siempre se cierne sobre los gastos generales mientras realiza transacciones en línea.
Una conexión a Internet defectuosa o un fallo técnico a menudo hace que el importe a pagar se cargue en la cuenta de un cliente sin que se acredite al vendedor. Y la recuperación de esta cantidad es cualquier cosa menos un proceso rápido; uno tiene que informar al sitio y luego esperar alrededor de 7-10 días antes de que la cantidad sea reembolsada a sus cuentas bancarias.
Pero esta situación está mejorando constantemente, ya que el sector se está centrando más en las transacciones sin efectivo y los clientes se están informando más sobre la realización de pagos en línea.
Cargos adicionales a la tarjeta
¿Cuántas veces ha sucedido que usted ha visto una gran cantidad de un producto y cuando usted está a un clic de distancia de la compra se ha dado cuenta de un cargo adicional de envío. Esto es común en todos los sitios de comercio electrónico cuando la cantidad de su pedido no es lo suficientemente alta para calificar para el envío gratuito.
E incluso cuando lo es, a veces estos gastos de envío se añaden a cada producto individual (si está comprando varios productos, por supuesto) y no al pedido colectivo.
Con todo eso, comprar en Internet para negocios con poco capital es lo mejor que se puede hacer en la actualidad. El comercio online es la nueva sensación de los compradores que quieren evitarse hacer colas frente a un cajero.